El domingo quedamos unos amigos para hacer una ruta en BTT. El lugar escogido fue
El Grupo estaba formado por: Juanma, Felipe, Dani, Loli, María, Alex, Lidia, "El Coletas" y yo (Inda).
Quedamos temprano en el mismo pueblo de Abrucena. A eso de las 10 estábamos todas y todos allí.
El día amaneció lluvioso y frío, miramos a las cumbres para ver que nos depararía el día.
Aparcamos los coches y montamos las bicis para empezar a subir. Desde Abrucena salimos Dani, Juanma, Felipe y yo. Los demás saldrían desde el área recreativa de Las Rozas.
Desde la partida la carretera asciende con un gran desnivel.
Acuso las fuertes pendientes sin calentar y al principio me cuesta seguir el ritmo. Antes de llegar a las Rozas, me encontraba mal y es que siempre me pasa igual, como salga rápido y no caliente, pronto lo acuso, no cojo el ritmo y voy mal.
Al llegar a Las Rozas, decido tomar mi ritmo, Dani tira para adelante, Felipe y Juanma se quedan detrás, porque a Juanma se le ha soltado una cala y tienen que parar a fijarla.
Poco a poco me voy encontrando mejor y voy cogiendo el ritmo, al poco rato llego a la altura de los compañeros que han salido desde las Rozas, Loli, María y compañía. Dani ha seguido un poco hacia delante, sigo un poco hasta alcanzarlo, paramos a descansar y reagruparnos.
Continuamos subiendo, encontramos las primeras zonas de nieve, se hace difícil circular entre ellas porque hay que atravesarlas por las huellas de las rodadas de los vehículos todoterreno y están embarradas.
El cambio me va dando problemas, tengo que parar varias veces. Por encima del refugio de Puntal Redondo, encuentro a Dani, paramos para reagruparnos.
Seguimos todos y todas hacia arriba, vamos cruzando trozos con nieve, hasta que llegamos a un sitio a más de 1800 mts de altura, donde la nieve ya es permanente, no podemos continuar.
Decidimos volvernos y tomar una pista más pequeña, que comunica con la pista principal más arriba. La pista después de un trecho también esta nevada, no sabemos que hacer, si volvernos o seguir adelante.
María con decisión, decide seguir hacia delante, la pista se puede transitar a los 100 mts y pronto llegamos al cruce con la senda que vamos a utilizar para bajar. Esta senda es un trozo del sendero Sulayr, que recorre circularmente toda Sierra Nevada.
Es fascinante descender por la senda, nos gusta muchísimo a todos, es muy divertido, después del duro ascenso, es una buena recompensa.
Pronto llegamos a la pista principal, por donde hemos subido, tomamos el camino de vuelta.
Llegamos a Las Rozas embarrados, paramos allí, hablamos con los guardas forestales. Nos echamos una foto de grupo. Con el bidón de agua, le quitamos el barro más fuerte a las bicis.
Dani, Juanma, Felipe y yo, seguimos descendiendo hasta Las Rozas. Los demás toman los coches.
Terminamos la jornada en Abrucena en casa de Juanma, tomamos la comida, gracias a la atención de Juanma, que nos proveyó de ensalada y cerveza y al final tomamos hasta mate argentino. Nos lo pasamos estupendamente.
A ver cuando lo repetimos.
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